En nuestro entorno es fácil encontrarnos con un sin fin de ejemplos de láminas de metal dobladas que ya damos por hecho; desde postes de luz, canalones, gabinetes, etc. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cómo es que se pueden hacer trabajos tan precisos en esas grandes placas de metal que a veces pueden ser de espesores gruesos? Bueno, este proceso se ejecuta con una Plegadora de Metal.
¿Cómo funciona?
La deformación plástica de láminas de metal o chapas se logra a través de un mecanismo muy simple, pero no por ello poco fascinante. La lámina de metal se coloca en medio de dos piezas clave; el punzón y la matriz. La presión que el operador imprime sobre el punzón, hace que la lámina o chapa tome la forma de la matriz logrando dobleces en ángulos abiertos (mayores de 90°) o cerrados (menos de 90°).
La complejidad de esta labor viene al considerar tres principales factores:
- El tipo de metal a doblar
- El tipo de aleación del metal
- El espesor del material
Los dos primeros factores determinan la dureza o maleabilidad del metal así como su ductilidad o capacidad de regresar a su forma original. El tercero de estos factores es decisivo para determinar el tonelaje de fuerza necesaria para doblar la lámina.
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¿Qué consumibles requiero para operar mi Dobladora de metal?
Como pudimos ver en los párrafos anteriores, en realidad una plegadora de metal no requiere consumibles, salvo el aceite necesario para para mantener lubricada la máquina y posibilitar un trabajo fluido.
Todo lo que necesita tu dobladora de metal para lograr ángulos perfectos es una mesa de trabajo o matriz, punzones y las habilidades de un diestro operador.
¿Qué máquinas existen en el mercado?
Existe una gran oferta de maquinaria para doblar metales que van desde procesos manuales, hasta aquellos que simplifican la producción haciéndola completamente automatizada. A continuación te hablaremos de tres categorías de dobladoras.
- Manuales: La operación de estas máquinas depende completamente de la pericia del operario para aplicar la fuerza y presión necesarias en el doblado de las chapas. Este tipo de maquinaria, en ocasiones, puede necesitar hasta tres operarios que proporcionen la fuerza requerida al doblar láminas de espesores considerables.
- CN (de barra de torsión): Esta es una máquina más compleja que integra motores, controladores y topes. Funciona con cierto nivel de automatización y además es mucho más sofisticada y robusta. Este equipo automatiza el descenso de la cortina (que contiene los punzones), y ajusta la distancia de los topes, mismos que controlan la longitud del doblez, para un proceso de doblado más exacto y de alta calidad.
- CNC: Una plegadora de metal CNC es una máquina completamente computarizada y con un alto nivel de seguridad para el operario. Su nivel de automatización es tal, que permite una amplia gama de movimientos de los ejes para un trabajo que requiera piezas más complejas, minimizando errores de factor humano. La seguridad del operario está cubierta; la configuración de parámetros de doblado minimiza accidentes al operario, además cuenta con sensores de seguridad detienen su operación en caso de ser necesario.
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En el mercado, las opciones son diversas, desde las manuales que dependen de la destreza humana hasta las CNC completamente automatizadas que elevan la precisión y seguridad. La elección depende de tus necesidades específicas de producción.
En resumen, las dobladoras de metal no solo son herramientas, son maestras de la precisión y la versatilidad en la manipulación de láminas, contribuyendo al desarrollo de una amplia gama de productos que forman parte del desarrollo de nuestra vida cotidiana.
Contáctanos para conocer cuál es la mejor opción para tu empresa según tus objetivos de producción.
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